Por Iqbal Kan
El almacenamiento en caché distribuido proporciona escalabilidad que puede aliviar las granjas de servidores sobrecargadas y revitalizar los sistemas apáticos.
A medida que las tecnologías de arquitectura web y orientada a servicios se vuelven más populares, los hospitales las están adoptando rápidamente para automatizar sus operaciones y permitir que su personal administrativo, médicos y pacientes accedan directamente al sistema de información del hospital (HIS). Si bien esto ha introducido muchas eficiencias en las operaciones hospitalarias, también ha introducido nuevos dolores de cabeza para la gestión de TI del hospital debido a una mayor carga en el HIS.
Un HIS consiste en un conjunto integrado de aplicaciones web que automatizan las operaciones del hospital. Esto incluye aplicaciones que gestionan operaciones administrativas, financieras, clínicas, radiológicas y de laboratorio. Por lo general, hay miles de personas diferentes que utilizan este sistema en un momento dado. Sin embargo, a pesar de la gran cantidad de usuarios, todos esperan que el sistema funcione bien incluso durante las horas pico de uso.
Los hospitales intentan abordar la escalabilidad creando granjas web que constan de múltiples servidores web unidos a través de un equilibrador de carga para distribuir la carga de los usuarios. Sin embargo, a medida que crece el número de usuarios y transacciones, suelen producirse diversos cuellos de botella en el acceso a los datos, lo que reduce considerablemente el rendimiento de esas operaciones.
Las soluciones típicas para resolver este desafío, como agregar más servidores, se quedan cortas y no brindan la escalabilidad necesaria para mantener HIS en su rendimiento normal durante el uso máximo. La escalabilidad simplemente significa mantener el mismo rendimiento del sistema incluso durante las horas pico de uso.
Un hospital debe estar siempre operativo; por lo tanto, la mayoría de las aplicaciones en un HIS se consideran de misión crítica. Sin embargo, las aplicaciones con una gran cantidad de usuarios simultáneos son más propensas a sufrir tiempos de inactividad o problemas de escalabilidad. Una de esas aplicaciones es un sistema de información clínica (CIS) que se ocupa de registros médicos electrónicos. Un CIS se concentra en datos relacionados con el paciente y el estado clínico y lo utilizan el personal del hospital, los pacientes e incluso socios externos. Esto puede representar fácilmente miles, si no decenas de miles de personas.
Debido a su gran número de usuarios, un CIS es el candidato más probable a tener problemas de escalabilidad. Puede considerarse una aplicación de misión crítica porque los médicos, enfermeras, pacientes, oficinas comerciales y personal de registros médicos dependen constantemente de ella. Por lo tanto, debe proporcionar un 100 por ciento de tiempo de actividad y sin una caída notable en el rendimiento. Cuando un sistema de gestión de pacientes se ralentiza debido a problemas de escalabilidad, se produce un efecto dominó en las operaciones hospitalarias que afecta negativamente a los costes empresariales.